¿Está usted confundido por los informes contradictorios acerca de las dietas bajas en hidratos de carbono frente a bajos en grasa? Personas que hacen dieta no son los únicos. Los investigadores que estudia el diseño, incluso cuando se trate de ser lo más justo posible, a menudo no conocen todas las variables que deben tenerse en cuenta. Un estudio publicado recientemente en el Journal of American Medical Association (JAMA) nos da otra pista sobre por qué las personas responden de manera diferente a las dietas diferentes.
Los investigadores encontraron que las personas cuyos cuerpos producen niveles relativamente altos de insulina en respuesta a los azúcares perdieron más peso en una dieta que era baja en hidratos de carbono simples (una dieta de baja carga glicémica). En el estudio, los participantes que produce más insulina perdido casi cinco veces más en este tipo de dieta, que en un régimen bajo en grasa. Esas personas también vio disminuir su porcentaje de grasa corporal por 2 ½ veces más. En comparación, los participantes cuyos sistemas de producción más bajos niveles de insulina hizo tan bien en cualquier tipo de dieta.
El estudio también examinó la forma en que los factores de riesgo para la enfermedad cardíaca se vieron afectados por las dos dietas diferentes. cuenta con el colesterol y los triglicéridos se vieron afectados de manera diferente dependiendo de la dieta de los participantes siguieron. A diferencia de la pérdida de peso, sin embargo, la cantidad de insulina producida por una persona no afectó significativamente los resultados en este ámbito.
En lugar de dar la dieta estrictamente controlada comidas, los investigadores se basaron en el asesoramiento y orientación alimentaria para ayudar a elegir a los tipos y cantidades de alimentos. Esto hizo que el estudio particularmente interesante, ya que replican lo mejor una persona a dieta "hágalo usted mismo podía esperar alcanzar. Los participantes del estudio asistieron a talleres grupales, y también recibió una sesión de asesoramiento privado y cinco llamadas telefónicas de motivación. Estos se concentran más cerca del comienzo del juicio, que se extendía sobre un niño de 6 meses "período de intervención intensiva" y un niño de 12 meses de seguimiento.
Los programas de la dieta se basó en la idea de que harían los participantes se sientan más satisfechos y saciados, y reducir el hambre. Las presunciones son que la dieta de baja carga glicémica proporcionaría la energía en una forma fácilmente utilizable, y la dieta baja en grasas que proporcionan los alimentos que se han llenado y satisfactoria, pero con más volumen y menos calorías. No hubo recuento de calorías requisito, y la dieta no se les dijo que ir tras objetivos específicos de nutrición. En su lugar, recibieron información sobre los signos de hambre y saciedad, y dijo que "comer cuando tenga hambre, antes de ser muerto de hambre. Deje de comer cuando esté satisfecho, antes de convertirse en rellenos. " pautas de ejercicio físico también se les dio sobre la base de normas comunes de salud pública.
Las dietas bajas en grasa en este estudio consistió en cerca de 55% de carbohidratos y 20% de materia grasa, mientras que la dieta de baja carga glicémica objetivo de alrededor del 40% de carbohidratos y 35% de grasas. Aquellos en el programa de bajo contenido de grasa se les dijo que deben comer los granos de bajo contenido graso, verduras, frutas y legumbres y limitar su consumo de grasas añadidas, dulces y bocadillos altos en grasas. Se les dio una lista de alimentos separados en categorías de materia grasa de alta, media y baja, junto con la información y demostraciones de cocina para ayudarles a preparar comidas ricas en grasas y menor uso de las porciones apropiadas de alimentos más ricos en grasa.
El grupo de carga de bajo índice glucémico se recomienda elegir los alimentos como las verduras sin almidón, legumbres y frutas de clima templado, mientras que evitar los alimentos de alta carga glicémica como los granos refinados, vegetales ricos en almidón, jugos de frutas y dulces. Los participantes también recibieron orientación sobre la selección de las grasas saludables, como frutos secos, semillas y aceites vegetales adecuados. Al igual que el grupo bajo en grasa, que recibieron las listas de los manjares, asesoramiento y demostraciones de cocina para promover la elección adecuada y la evitación de alimentos inadecuados.
En general, los resultados finales mostraron que ambas dietas eran igualmente buenas para bajar de peso y reducir el porcentaje de grasa corporal. Las diferencias se presentaron sólo al mirar la cantidad de insulina de una persona produce en respuesta al consumo de azúcar. Cuando esto se tuvo en cuenta, los que tienen más alto que la producción de insulina promedio fue significativamente mejor en la dieta de baja carga glicémica. Esta dieta, con menos azúcares, no se activa como la producción de insulina.
Cuando factores de riesgo cardiovascular fueron controlados, la cantidad de insulina producida no hacer una diferencia significativa. Tanto para los productores de insulina alta y baja, los que siguieron la dieta baja carga glicémica tuvo la mayor mejora en su colesterol HDL (alta densidad de colesterol de lipoproteínas) cuenta y triglicéridos. Por otro lado, aquellos que siguieron la dieta baja en grasa tuvieron la mayor mejora en su colesterol LDL (el colesterol de baja densidad). Esto es consistente con los resultados de otros estudios.
Los investigadores creen que los niveles reducidos de grasas saturadas en las dietas bajas en grasa podrían haber sido responsables de sus mejores resultados con LDL. Especulan que si la gente en una dieta de baja carga glicémica se preocuparon de su consumo de grasas saturadas, que verían más grandes caídas en sus concentraciones de LDL, mejorando así los tres factores de riesgo. De hecho, otro estudio reciente encontró que las mujeres en una dieta de baja carga glicémica que era alta en grasas y proteínas vegetales redujo su riesgo de enfermedad cardiaca coronaria.
Así que, ¿cómo saber si su cuerpo produce un nivel superior a la media de la insulina? Usted podría tener una prueba médica. Para el estudio, los niveles de insulina se revisaron 30 minutos después de tomar el estándar 75g de glucosa oral. Pero puede haber ninguna ventaja real para tener esos resultados. Si su producción de insulina es baja a media, usted perderá el peso tan bien en la dieta tampoco. Mientras tanto, la dieta de baja carga glicémica parece tener la ventaja de mejorar la salud cardiovascular (siempre que limitar el consumo de grasas saturadas), independientemente de su producción de insulina. Así que cuidado con la ingesta de azúcar y almidón conducirá a una mejor salud para la mayoría de la gente, con la ventaja de la pérdida de peso más rápido para aquellos que pasar a producir mayores niveles de insulina.
